Escasos momentos compartí con Pep, suficientes para que la noticia de su
fallecimiento me haya afectado. A principio de año lo saludamos,
compartiendo reflexiones y ágapes, al que Pep asistia en su bólido
motorizado manejando con agilidad deportiva, como un útil necesario para
el intercambio. Y ahí, todos compartimos, desde el aprecio, el cariño
sentido y la hospitalidad del hermano. Maria, a su lado y al nuestro.
Por el CASAL (casa común), hoy 27 de agosto me llega la noticia del
deceso d'en Pep. Leo, recuerdo y siento que él sigue en el corazón de
muchas personas, entre ellas en los nuestros, y pienso que ahora Pep es
parte del alma infinita de esa porción de la Humanidad de la que él hizo
parte y que quiso caminar con el Colectivo Ronda, con el CASAL y los
otros universos sociales que compartió. Sin duda, Pep ocupa un espacio
en el calendario de los inolvidables, como David, Ferrera, Irony,
Sergio, y tantos otros y otras... Qué decir más. Agradecer que la diosa
del camino me haya permitido conocer y compartir seres como Pep. Para
Maria, vaya mi cariño y mi amistad, sencilla pero sentida, pequeño
presente a compartir con hijos, nietos y gente querida.
Paco Vera.
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